Poema sin sentido

No repitas con tu boca ni una de estas palabras impulsivas, no las leas
No gires la cabeza para ofrecerme una mirada sobre mis pestañas azules

rotas por el frío, crujientes hasta las lágrimas
Que no respire tu asma mis suspiros
y que no huela a paisaje montañoso el sueño que me aplasta al recordarte

No te broncees con mis halagos
ni me interpretes la memoria
no diagnostiques mi persona
ni malhumores mis encantos

No juegues con mi ceguera

basta ya de desoportunidades

de una vida en otra parte

del primer día 

del resto de

besos rojos

coagulos de glóbulos compartidos

No urguetees en los huecos de mujer enamorada
porque esta abierta la carne
y la sangre contamina...

No quites con las manos suaves la sal de mi mejilla
ni sostengas con tus brazos lo que ha de caer de todas formas


No me sostengas


será mejor el precipicio al conformismo ausente de la piel tibia

de las respiraciones simultáneas que estuvieron un día

 al borde extremo del paraíso abismal

No aspires profundo estas letras
tal vez llegues a pensarme
una, dos, tres centésimas de segundo
y será suficiente...
y te asfixie mi veneno
o te ahogues con mi imágen ardiendo en la pantalla
llorando en la pantalla,
muriendo en la pantalla.

Si tal vez, empuñaras mi sueño
o sudaras mi nombre a cada poro
mi alma dilatada de amor
desnudaría sonrisas de poxipol
lazos eternos de pensamientos simultáneos
entonces la tristeza sería indiferente... 

mi pulmón tu estadía
tus besos mi lava
mi cuerpo tu contorno
y tu sombra mi destino...